El estrés laboral y cómo
afrontarlo

El estrés laboral es un padecimiento muy frecuente en la sociedad, especialmente porque los tipos de trabajos y las relaciones humanas están cambiando continuamente. Cada vez los trabajos exigen más lo cual afecta al bienestar físico y psicológico del trabajador y del ser humano, este padecimiento puede deteriorar el clima organizacional.

Actualmente la mayoría de los trabajos precisan esfuerzo mental o exigen un esfuerzo físico que desgasta al que lo ejecuta.

En estos tiempos de pandemia por SARS-CoV-2/COVID-19 el ritmo de trabajo ha ido incrementándose, ya que muchas de las empresas han reducido la plantilla laboral al no poder cubrir con el salario de los colaboradores o bien por ahorro. El trabajo requerido se tiene que cubrir con un número menor de trabajadores los cuales tienen que alcanzar buenos resultados a costa de una carga excesiva de labores.

No siempre las respuestas para hacer frente a las demandas de trabajo tienen un carácter negativo, ya que muchas veces son necesarias para enfrentarnos a situaciones difíciles y para la supervivencia. Toda persona requiere de niveles moderados de estrés para responder satisfactoriamente no solo ante sus propias necesidades o expectativas, sino de igual forma frente a las exigencias del entorno. Y los niveles muy bajos de estrés están relacionados con desmotivación, conformismo y desinterés.

Algunas consecuencias del exceso de estrés en el ser humano pueden reflejarse en su aspecto:

Emocional actuando de manera ansiosa, irritable, mal humor, frustración, agotamiento, impotencia, inseguridad, desmotivación.

En su conducta en el día a día como disminución de productividad, cometer errores, reportarse enfermo, dificultades en el habla, risa nerviosa, trato brusco en las relaciones sociales, llanto, apretar las mandíbulas, aumento del consumo de tabaco, consumo de alcohol u otras sustancias.

En su aspecto cognitivo causando dificultad para concentrarse, confusión, olvidos, pensamiento menos efectivo, reducción de la capacidad de solución de problemas, reducción de la capacidad de aprendizaje.

Y por último en la fisiología humana ya que causa contracción de músculos, dolor de cabeza, problemas de espalda o cuello, malestar estomacal, fatiga, infecciones, palpitaciones, respiración agitada, aumento de la presión sanguínea, agotamiento, mayor riesgo de obesidad y de problemas cardiovasculares, deterioro en la memoria a, problemas de sueño.

Tras el efecto del estrés, este puede provocar el desarrollo de trastornos psicológicos como, por ejemplo; trastornos del sueño, trastornos de ansiedad, fobias, drogodependencias, trastornos sexuales, depresión y otros trastornos afectivos, trastornos de la alimentación, trastornos de la personalidad y trastornos esquizofrénicos.

Algunos métodos para sobrellevar el estrés y reducir estos niveles de este padecimiento pueden ser: